Con enorme pesar fue despedido ayer miércoles 22 de mayo uno de los más destacados profesionales del área de transportes y movilidad de la Dirección de Planeamiento. El profesional sufrió un infarto en su domicilio particular el día veinte en la noche.
Roberto Riveros Keller llegó un día 27 de abril del 2004 al Servicio, titulado con honores como Ingeniero Civil en la Universidad de Chile con mención en Transportes, contaba también con Maestría en Ciencias en Ingeniería, de la Universidad de California, Estados Unidos.
Riveros trabajó muchos años como Ingeniero Senior en Ingenieros y Economistas Consultores, INECON, adquiriendo experiencia y especialización en áreas Metodológicas, De Aplicación y Técnicas.
Previamente, su trabajo fue reconocido en 1969 por la sociedad de Economistas Agrarios como la mejor Tesis: “Modelo de Gestión y Transporte del Sector Triguero Nacional”.
Ya en el Departamento de Estudios de la Dirección de Planeamiento, participó en:
• Análisis y Diagnóstico de los Flujos de Transporte de Carga Internacional.
• Estudio Estratégico Nacional de Accesibilidad y Logística Portuaria: Impacto en la Competitividad, el Uso de Suelo y en la Calidad de Vida Urbana.
• Análisis de Escenarios de Inversión en Infraestructura Vial para el Área Metropolitana de Santiago, 2006-2020
Análisis de Modelos de Financiamiento de la Infraestructura Pública MOP.
• Estudio Binacional de Conectividad Argentina‐Chile.
• Análisis Requerimientos de Conectividad Internacional Zonas Sur y Austral.
• Uno de los últimos e importantes trabajos en que participó fue Brechas y Estándares de la Infraestructura Pública en Chile, como contraparte de la OCDE, en 2017.
Roberto Riveros también ejerció la docencia en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, Departamento de Ingeniería Industrial, entre 1973 y 2004.
Su carácter lo hizo muy querido entre todos sus compañeros de labores. Afable, amante de la buena mesa, comprometido, generoso con sus conocimientos y modesto, no dudó en personificar el Viejito Pascuero cuando se lo propusieron. Cada Navidad y por varios años, bajo los implacables rayos del sol, llevaba felicidad a los niños y niñas de Planeamiento repartiendo regalos, ilusiones y sonrisas.
Su sorpresiva muerte deja con profunda tristeza a su gran familia: su compañera de vida por casi cincuenta años, Jovina Jiménez, sus cuatro hijos y sus seis adorados nietos.
Más de un centenar de personas, de prácticamente todas las direcciones del ministerio y de todos los estamentos, amigos y familiares despidieron a Roberto Riveros en el Cinerario del Parque del Recuerdo en Santiago. Los sentidos testimonios de sus hijos y compañeros de trabajo dieron cuenta de sus grandes virtudes como un ser humano y profesional que será siempre muy bien recordado.
